Más grande y brillante que lo habitual, dará un espectáculo único en el cielo. Lo que hay que saber sobre un fenómeno natural impactante.
El mes llega a su fin con un fenómeno astronómico espectacular. Amantes de los eventos estelares y de la fotografía a prepararse: este domingo 28 de marzo de 2021, la Luna de gusano se apoderará del cielo para deslumbrarnos con un brillo y un tamaño superior a lo habitual.
La primera Luna llena de la primavera (en el hemisferio norte) y del otoño (en el hemisferio sur) se producirá a las 15:48 (hora de Argentina y Chile); a las 19:48 (hora de España); a las 12:48 (hora de México); a las 13.48 (hora de Perú, Ecuador y Colombia); y 14:48 (hora de Bolivia y Venezuela).
Ultra instagrameable, ideal para postear en redes sociales o descollar con una buena foto (siempre que el clima acompañe), esta Luna se destacará en el cielo nocturno hasta el martes 30 de marzo.
Una superluna es una Luna llena que, en su orbita mensual, se forma en el punto más cercano a la Tierra, el perigeo. De acuerdo a los astrónomos, las superlunas pueden parecer tener hasta un 14 por ciento más de su tamaño habitual y ser hasta un 30 por ciento más brillantes que las lunas llenas habituales.
Pero si bien esta Luna de gusano se verá más grande y luminosa que lo normal, no puede considerarse una Superluna ya que no se encuentra lo suficientemente cerca de nuestro planeta como para serlo a pesar de ubicarse como la cuarta Luna más brillante del año.
¿Por qué se llama así?
Mística representante de lo femenino y de la fertilidad, desde la antigüedad la Luna se ha ubicado en el foco de atención de las diferentes culturas. Tanto por su naturaleza como por los fuertes efectos que provoca, desde siempre despertó un enorme interés y una indudable magia a su alrededor. Y más aún cuando es una Luna llena.
Así es que mes a mes se le ha dado un nombre de acuerdo a las características del clima. En este caso, la Luna llena de gusano es la primera Luna de la primavera (en el hemisferio norte), el momento del año en el que el suelo se descongela y aparecen estos pequeños animales sobre la superficie.
Pero también -aunque siempre relacionado con las condiciones climáticas- se conoce a este fenómeno como "Luna llena del Cuervo", debido a que el graznido de estas aves anuncia el final del invierno; "Luna de azúcar", ya que a lo largo de la temporada se cosecha el jarabe de arce; y "Luna llena de la corteza", porque la nieve comienza a derretirse y se convierte en una delgada capa sobre la corteza de los árboles.
Para las diferentes denominaciones que recibe nuestro satélite natural no hay explicaciones científicas. Simplemente fueron llamadas de este modo por los algonquinos -un grupo de pueblos nativos de América del Norte- que las nombraron, como dijimos, en relación a los eventos agrícolas, culturales o climáticos del momento.
Fue el Almanaque del Granjero de Maine (Maine Farmer`s Almanac) -una revista norteamericana que se dedica a vincular temas como el clima, las cosechas y los eventos astronómicos- el responsable de publicar en 1930 por primera vez los diferentes nombres indios que recibe la Luna.
FUENTE:
clarin.com
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