Las viviendas de varios pobladores fueron invadidas por las aguas. Algunos parajes quedaron aislados, y hay preocupación por la crecida del río Iruya.
Varias casas anegadas, el derrumbe de otras construidas de adobe, habitantes de parajes que quedaron aislados y el peligro de que se corte la salida por la ruta provincial 18 preocupan a los pobladores del pequeño pueblo de Isla de Cañas, ubicado a más de 350 kilómetros de la ciudad de Salta.
El comunicador Eulogio Aramayo, de FM Santiago, de Isla de Cañas, envió anoche un pedido de ayuda, advirtiendo que en su pueblo está "complicado el panorama" debido a "las fuertes lluvias que hay en la zona".
"Hace una semana venimos teniendo lluvias casi todos los días, en las noches las precipitaciones son abundantes", contó Aramayo. Explicó que al haber llovido tantos días, "las casas que son de adobe" comenzaron a ceder, como ocurrió con la vivienda de Berta Benítez.
Aramayo contó que además, entre San Martín y Güemes, "el desagote que tiene, un canal, ya no fue lo suficiente" para contener el agua que corría y "rebalsó para las casas. Entró agua en el domicilio de Miguel Zerpa, de María Cabana, Néstor Cabana, Atilio Zambrano. Son muchos", aseguró en comunicación con Salta/12.
Isla de Cañas es un municipio del departamento Iruya, pero, a diferencia del pueblo homónimo cabecera departamental, está ubicado en tierras bajas, a solo 660 metros sobre el nivel del mar, y su clima es tropical, con abundantes lluvias para estas épocas.
Por los accidentes geográficos, se accede a Isla de Cañas a través de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán, cabecera del departamento Orán. Para llegar al pueblo desde esta ciudad se deben hacer 5 kilómetros por la ruta nacional 50 y luego empalmar con la ruta provincial 18, cuya transitabilidad de ve ahora amenazada por el agua.
"La lluvia también hace que la ruta provincial 18 esté precaria. La arreglan y a la noche la vuelven a cortar las fuertes lluvias. El puente que está sobre la ruta provincial 18, a 5 kilómetros del pueblo está en jaque, la verdad que es complicado", describió Aramayo. Explicó que hay una catarata "que lo está socavando (al puente) y corre riesgo impresionante".
Y si las cosas están mal en Isla de Cañas, "qué hablar de los pueblos como Cortaderas, Limoncito, Tres Morros", que "están anegados, nadie puede llegar, solamente por vía área", añadió el comunicador.
Cortaderas es una comunidad más bien rural, a 20 kilómetros de Isla de Cañas. Atravesada por el río Cortaderas, en esta época de lluvias, la comunidad queda incomunicada incluso entre sus dos lados.
El paraje El Limoncito, igual que Tres Morros, también se encuentra a la vera del río Iruya, que baña a todas estas localidades.
Anoche mismo, mientras Aramayo brindaba este informe, llovía sobre Isla de Cañas y su zona de influencia.
El comunicador insistió en que en el pueblo hay "mucha gente preocupada". Señaló que el" río Iruya aumentó bastante" y "sigue socavando para el sector del pueblo".
"Está difícil. No solamente Isla de Cañas, pueblos como Cortaderas también tienen gente que está sufriendo, que entró el agua a las casas", afirmó. Contó que anteanoche, a eso de las 4 de la madrugada, miembros de la Policía, la ambulancia del hospital local y personal de la Municipalidad anduvieron recorriendo las zonas anegadas "tratando de ayudar".
"Hay unas familias que están cerca de unas cañadas" vecinas a la zona urbana que ahora, por la fuerza de las correntadas que se forman, se oradaron y "entraron para el pueblo", contó Aramayo.
FUENTE:
pagina12.com
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